Un análisis más de otra de mis carreras con diabetes: El Trail del Serrucho. Es la prueba con la que solía empezar la temporada. Es el primer trail del año en la Comunidad de Madrid, con 24,4 km y 470 metros de desnivel positivo.
Empiezo el día con una glucemia de 269, muy alto para empezar la jornada así que. desayuno unas 3 horas antes de la salida manteniendo la basal (Levemir – 10 ud) y subiendo Novorapid 2 unidades a las raciones que tomé para corregir y empezar la carrera no muy alto.
Al inicio estoy en 97, muy poco para mi costumbre, por lo que tomo un zumo y un plátano. No hago glucemias durante la carrera ya que al no haber prácticamente tramos de andar decido no sacrificar los 30 segundos que empleo en mirar la glucosa y que no se me vaya mucho ese km: un exceso de confianza que, aunque no salió del todo mal, no es conveniente permitirse.
El hecho de tener buenas sensaciones tanto deportivas como en cuanto a niveles de glucosa se refiere, me hacen tomar esa decisión. Aunque no es lo más prudente, es lo que hago, motivado por la confianza de haber entrenado mi diabetes tanto o más que las piernas; sospechar de hipo o hiperglucemia sí que me habrían hecho detenerme y hacer glucemia capilar (no llevaba sensor puesto) pero el espíritu competitivo y la seguridad de saberme bien me llevan a meta sin capilares. Que no sirva de ejemplo!!
En meta 57 de glucemia. Error, haber mantenido la levemir o no haber tomado algo más alrededor del km 17-18 aunque con la pizza recién hecha del avituallamiento de meta se remonta rápido. Habrá que glicontrolarse mejor para la siguiente.
La foto es una conversación que mantuve con Antonio Lledó nada más terminar la carrera en la que me contaba cómo hacía él al enfrentarse a los ultras de más de 100km, que aún a día de hoy me parecen inalcanzables: «intento salir sin rápida activa y bajar la basal en función de la exigencia de cada carrera» me decía. Aprendí mucho hablando con Antonio, él ya había experimentado todos estos ajustes y le fueron bien. La clave es encontrar los que nos van bien a cada uno. A partir de aquel día empecé a cambiar cosas que, a día de hoy, mantengo y funcionan!
El resultado deportivo fue muy modesto, como no puede ser de otra forma en mi caso: 2.16.05h, mitad de tabla y un ritmo de 5.35 min/km para los cerca de 25km de monte bajo en Alalpardo. Seguimos!!